LA TRIVIA DEL ENCUENTRO

Detrás de los tres días de encuentro, discernimiento y misión, hay una serie de datos extraordinarios acerca de la preparación del Segundo Encuentro Nacional de CVX Jóvenes. Ahora se los dejamos para que tomen nota de que uno planifica y organiza, pero hay cosas que superan nuestra voluntad y control. Y claro, El pone de su parte.

- A dos semanas del Encuentro, la persona que iba a ayudar en la cocina presentó problemas. Y canceló su participación. A una semana, aún el equipo no podía hallar a alguien dispuesto a estar tres días en Lo Vásquez al mando de las ollas y los platos. Eso, hasta que la tía Lili se presentó como la mejor opción. Su participación en el Encuentro trascendió la cocina y fue una más de los allí reunidos. 

- Lo mismo con el lugar, la Casa de Retiro de lo Vásquez. Partía septiembre y los lugares disponibles se caían porque no tenían disponibilidad en ese fin de semana, o definitivamente, escapaban del presupuesto. Y de nuevo, se presentó este excelente lugar.

- Miguel lo hizo notar el sábado, mientras exponía sobre la Misión de la CVX: La Conferencia de Aparecida, la Asamblea General CVX de Fátima y el segundo Encuentro de CVX Jóvenes ocurrieron en santuarios de la Virgen. Y esto va más allá: si revisan la foto oficial del primer Encuentro (está publicada más abajo), podrán observar que es la Virgen María la que nos acompaña detrás, protegiéndonos y dando ánimo.

- Rocío Cáceres no lo podía creer: ella, que estudia en Antofagasta y viajaba a Lo Vásquez al Encuentro de CVX Jóvenes, iba a estar unos metros de su hermano, que se encuentra en el Seminario que la diócesis de Valparaíso tiene a un costado del Santuario.

- Sonia, la esposa del profesor Luis Horacio Franco que participó en el bloque "Mirando el Mundo", también no lo podía creer. Su marido había sido invitado a un Encuentro de jóvenes cevequianos. Ella misma había sido cevequiana por cinco años, cuando estaba en el colegio (Villa María) y luego en la universidad. Pura casualidad ,¿ustedes creen?

- Unos más, otros menos; en promedio, cada miembro del equipo de servicio durmió tres horas cada noche del Encuentro.

- Eran un cuarto para las diez de la noche del día jueves 16 y Pedro, el "adulto responsable" del equipo de servicio, recibió una llamada. Era Andrés Lira, SJ, jesuita y ex asistente eclesiástico de la CVX de Concepción que se sumaba al Encuentro.

- Roxana Campos, jefa de Intendencia, también se sumó a los pocos días antes del Encuentro. LLegó ese mismo jueves, a las 12 de la noche, desde su lugar de trabajo, en la sexta región, donde participa del programa ServicioPaís.

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